Este no es un árbol cualquiera: lleva el peso del deseo, el registro de cada tentación prohibida. Sus frutos, las inconfundibles manzanas del conocimiento y la caída, cuelgan cargados de significado. Bajo él, las marcas de días y decisiones grabadas en el tiempo, un silencioso recordatorio de que la vida es tanto la cuenta de los días como la persistencia de los deseos. Los ardientes trazos rojos estallan como impulsos que no podemos silenciar, recuerdos que queman a través del tejido de la restricción.

Obra original de Papayon. Resiliencia y temas espirituales. Cianotipia mixta sobre papel, 15x20 cm. Envío a todo el mundo y certificado de autenticidad.